Ignoro como sucedió. Hace unos años
me la pasaba tranquilo devorando las aventuras de 5a edición con una
calma absoluta y hasta cierto disfrute. Out of the Abyss, Curse of
Stradh y hasta el aburrido
Tales from the Yawning Portal me resultaban digeribles. Pero en
esos años, al mismo tiempo me la pasaba revisando los materiales de
la editorial Lamentations of the Flame Princess y así mi
forma de ver las aventuras fue cambiando de forma drástica.
Las descripciones detalladas de un
cuarto parecían sobrar, el trasfondo de tres cuartillas dedicados a
un pnj menor eran criminales y me fueron dando asco los retos en
donde la victoria era casi inevitable. Mi mentalidad había cambiado,
los despropósitos de 300 cuartillas de WotC ahora me resultan
tortuosos. Y aunque se bien que exagero me resulta increíble la
forma en como las editoriales relacionadas con la OSR te pueden
detallar regiones enteras con 200 cuartillas y menos. Ya ni hablemos
de one-shots, muchas aventuras se explican bien con menos de 30
paginitas.
La clave consiste en que las
editoriales ajenas a WotC, realmente te quieran entregar un set de
herramientas antes que el brindarte una experiencia enlatada. Y
aunque disfruto de ambos tipos de aventuras, la cantidad de trabajo
que exigen las aventuras oficiales de D&D, superan por mucho a
las de las OSR.
Y lo peor, es que la complejidad y
exceso de trasfondo y detalles inútiles en los módulos de D&D
se mantienen por el simple hecho de que así se espera que sean las
aventuras de D&D. Existe una tradición desde 2a edición en
relación con la cantidad de información sobre los pnjs, las
descripción al interior de la aventura, complejidad de los mapas y
una excesiva repetición en relación a los conflictos.
Estoy completamente seguro que una gran
cantidad de diseñadores al interior de WotC quisieran hacer módulos
menos aparatosos, pero ya debe existir un set de reglas prácticamente
obligatorio sobre como editar los materiales.
Tal vez un cambio de formato se
presente con la 6a edición. Pero de momento los narradores con ganas
de estar a la moda, tendremos que seguir soportando los tochos
infumables de 5a, los cuales me encanta dirigir, pero me molesta
leer.
En mis partidas improviso mucho y tiendo a salirme mucho del guión inicial, así que me imagino que a otros másters les pasa igual, pero si comprar módulos es porque no quieren pensar las partidas. En esa situación me imagino que cuanto más detalle y profundidad tenga un módulo (más los de tipo sandbox, no los que van todo el rato "sobre raíles"), más facilidad tendrá el máster para adaptarlo a lo que necesite.
ResponderBorrarClaro mucha información puede ser algo bueno dependiendo del estilo del narrador. Pero creo que luego estos modulos de DnD pecan de brindar información de sobra. Grax por comentar. Saludotesssss!!!
Borrar